Secret of Mana es uno de esos pocos RPG de acción que permiten que otra persona pueda ayudarte de forma cooperativa. Es así como he jugado esta vez y la experiencia es ligeramente distinta a jugarlo solo.
Cuando comienza el juego unicamente se puede controlar a un personaje, pero pronto aparece un segundo que podrá controlarlo una segunda persona, como si fuera el jugador principal, pero con su propio monigote.
La historia trata de un muchacho que se encuentra una espada que resulta ser la Espada Mana. Resulta que tras esto empiezan a aparecer bichos malotes y en su pueblo lo relacionan al sacar la espada de su sitio.
Tras ser desterrado se le encomienda la misión de visitar los templos de Mana para restaurar el poder de la espada. Por el camino se encuentra con la princesa de un reino y un duende que en un principio le interesa timarte para conseguir dinerito. Un poco mas adelante descubres que el imperio pretende adueñarse de las semillas de mana para resurgir el Fuerte Mana.
Dejando aparte el argumento apocalíptico de que el mundo se acabará y tu eres el único que puede salvarlo, el juego ofrece bastante entretenimiento explorando distintos templos con muy pequeños y sencillos puzzles. La mayor dificultad será avanzar sin que los enemigos te pateen el trasero. Para defenderse, disponen de un gran abanico de ataques. Con un total de 8 armas, que además pueden mejorarse visitando a un herrero, la diversidad de ataques y combinaciones es muy amplia. Para poder atacar simplemente hay que pulsar el botón correspondiente, pero no se puede aporrear tan sencillamente, para poder golpear de nuevo tenemos que esperar a que nuestra «fuerza» se recargue. Cuando llega al 100% el golpe volverá a hacer el daño que debe, sino será como darle con un periódico.
Es una forma de añadir algo de estrategia a los combates, puesto que después de atacar tienes que cubrirte de que no te golpeen hasta que puedas atacar de nuevo. El problema viene cuando mas adelante en el juego los enemigos empiezan a esquivar los golpes como si estuvieran untados en aceite. No se si es por la evasión que tienen los enemigos en este punto, o porque ciertas animaciones les dan protección y son excesivamente largas, pero matar a uno de estos bichos puede resultar largo y tedioso hasta el punto que tengas que recurrir siempre a la magia para poder avanzar.
El protagonista no puede utilizar magia, pero los otros dos personajes si. La chica utilizará la magia defensa o de soporte mientras que el duende usará la magia ofensiva.
El hecho de que el prota no tenga magias ayuda a los jugadores que jueguen solos puedan centrarse en atacar mientras encomienda a la CPU a hacer el resto de tareas. Estas acciones se realizan accediendo al sistema del menú de anillos tan famoso en esta saga.
Los gráficos son bonitos pero algo desfasados comparado con los últimos RPGs de la consola, no es justo esta comparación pero tal vez a los exigentes les preocupe. A mi personalmente, no. Son muy coloridos y gracias al tamaño de los sprites, están bien detallados. Cada arma que se equipen los personajes se verá reflejado en el sprite y además dependiendo del nivel del arma, la animación al atacar será diferente. Cada magia también tiene sus propias animaciones y efectos.
La música es excelentísima, su banda sonora sería impecable si no fuera por un par de canciones que suenan horriblemente y si tienes tontera de cabeza mientras juegas podrías acabar echando espuma por la boca. Como puede ser que haya temas como este;
y que después tengas que oír algo como esto:
Finalmente pequeña mención a lo terrible que es moverse por el mundo. No aparece el mapa a menos que pulses no recuerdo que botón, porque yo manejaba al segundo personaje, que hace que cambie a una pantalla aparte para ver donde estas. Es peligroso no acordarte bien a donde te dicen que tienes que ir, puesto que si te desvías un poco ya puede rezar para volver a situarte correctamente. Aunque siempre puedes tener un mapa al lado para ello.
Este juego ha recibido 3 estrellas de 3 en mi lista de juegos completados.
Jugar con compañía resulta bastante mas entretenido ya que puedes comentar mientras juegas que hacer, por donde ir o que se le ha podido pasar por alto a uno y no al otro. Aparte de que manejar un único personaje en vez de 3 facilita muchísimo centrase en combatir. Es una experiencia que hay que probar y que encima en un juego como este, con buena música y buenos gráficos, sienta mejor. Si os interesa jugarlo, pero no tenéis una Super Nintendo a mano, podéis comprar un especie de remake raro para iOS en el Itunes.















Por la parte gráfica, el juego derrocha mucho amor y cariño por la animación de los sprites durante todo el juego. Normalmente en otros juegos cuando ocurre alguna escena concreta ves que utilizan las animaciones típicas una y otra vez en cada una de ella. En el caso de Popolocrois, la animación de los sprites para cada escena son únicas, dándoles una personalidad única y haciendo que le juego parezca mas un capitulo de la tele. Los escenarios están espléndidamente detallados y en ocasiones tiene algún efecto sobre ellos que los hacen destacar aún mas.
Al ser tres historias en un único juego, se nos presenta una situación pocas veces vista en otros juegos, que es la evolución de los NPCs en los pueblos. Según va avanzando la historia, y no tiene porque ser entre capítulos, los habitantes de los distintos pueblos tendrán distintas cosas que contarte. No es algo que realmente afecte al juego, pero he de mencionarlo debido a esos personajes de otros RPGs que ni se inmutan cuando un ser del inframundo esta quemando medio mundo y ellos siguen diciendo que les gusta beber zumo por las mañanas. Mención especial también a los compañeros que acompañan al protagonista, todos y cada uno de ellos derrochan un gran carisma y en seguida les coges simpatía. Durante el juego tambiñen hay escenas que les involucran dándoles mas protagonismo.
En general es un RPG muy correcto donde lo que mas destaca es el carisma que derrochan los personajes que te acompañan, la animación de los eventos y la música de la mayoría de sus escenarios. Tras descubrir todo lo que le han quitado al juego a y el problema del audio, me quitaban las ganas de darle esta nota. Pero este es el juego que he jugado y este juego de por si se merece las 3 estrellas. Si hubieran sido los tres juegos de PSX sin cortes habría recibido las 3 estrellas sin duda.



El argumento es muy muy sencillo. Yuki, un chaval a le interesa poder volar en su propia avioneta intenta hacer un vuelo de prueba con un trasto no muy seguro. Como era de esperar, el aparato se estrella en un bosque cercano donde se encuentra con una muchacha que está siendo perseguida. Después de un poco de bla bla, rollo rollo, combates y alguna cosa mas, descubrimos que esta muchacha es una «comunicadora» capaz de hablar con los espíritus encargados de mantener la paz en el planeta. Se te explica que su hermano también lo era y que el papel de ambos era la de poder comprender a estos espíritus para que les comunicaran como estaban las cosas. Pero este hermano suyo desapareció cuando ella era aun una niña.
Una de las novedades es que el famoso golpe critico que anula el golpe del enemigo puede lanzar por los aires, y si en ese momento otro de los compañeros ataca, podrá hacerle un combo aéreo que hará bastante mas daño. Las habilidades y magias son un poco mezcla de ambos juegos mas sus propios extras. Por un lado, las habilidades hay que comprarlas o extraerlas de unos libros. Para poder equiparlas, necesitas tener el nivel adecuado, cuanto mayor nivel tengamos, mas habilidades podremos equiparnos y de mas nivel también. Los libros de por si se equipan para poder potenciar las habilidades. Estas habilidades se reparten en tres grupos; Fuerza, efecto y vida. Pueden haber libros que suban mucho un grupo pero no el otro.
Existe otra pega que arruina la experiencia del juego. Eso es, el propio sistema de combate tan excelente se ve afectado en este juego. Cuando completas el primer disco, la dificultad de los combates aumenta en proporciones desproporcionadas. En ese sistema, existen dos barras de tiempo que te permitirán saber cuando podrás decidir el siguiente movimiento y el tiempo que necesitará para poder ejecutarlo. Estos tiempos los ves indicados en una esquina de la pantalla mientras luchas, permitiendo plantearte estrategias para ver cuando necesitas curar, desplazarte por la con de combate, hacer alguna magia o protegerte. El problema viene que en el segundo disco todos los enemigos son infinitamente mas rápidos que tus personajes, haciendo prácticamente imposible plantearse estrategia alguna. Esto provoca que de repente todos los combates se vuelvan en una repetición de habilidades y magias sin otra razón que procurar eliminar a los enemigos lo antes posible. El hecho de que los enemigos sean tan rápidos, hace que al recibir tantos golpes seguidos tu barra de tiempo se alargue y recibas cantidades de año considerables. Una castaña vamos y muy triste en mi opinión ya que era la razón mas gorda por la que quería jugarlo.
Los personajes que acompañan a los héroes no tienen carisma alguna. En seguida comprobaras que no aportan nada y que una de ellas tiene unas tetas enormes que no se le puede ver la cabeza cuando la enfocan desde debajo. Los únicos personajes que se pueden mencionar con la cabeza alta es al hermano que ahora es el malo del juego y a dos personajes que abandonaran el grupo a mitad del primer disco. Un desastre.
Estoy muy triste en como ha salido este Grandia III. El pobre sistema de combate del que tan orgullosos puede estar esta saga se ve totalmente estropeada a causa de un desnivel en la velocidad de los enemigos a la hora de poder ejecutar acciones. La historia sencilla también se ve deteriorada por culpa de las típicas chorramingadas del amor y la amistad. Si le llegan haber quitado eso, hubiera sido mas que aceptable. Es decir, que el juego de por si era bueno hasta que hicieron esas dos cagadas. Solo recomiendo el juego si como yo, te interesa poder disfrutar de un nuevo juego con este sistema de combate, pero recuerda, que a partir del segundo disco todo se vuelve mas desagradable. Al resto de la gente. Jueguen el primero o el segundo directamente.
